¿Cómo ayudan los puzzles al desarrollo cognitivo?
Los rompecabezas son una forma estupenda de ayudar al cerebro a funcionar correctamente más adelante, pero ¿qué beneficios tienen para los niños pequeños? Hemos encontrado algunos datos clave que demuestran que los puzzles son el alimento perfecto para el cerebro, sea cual sea su edad.
Un puzzle enseña a los niños pequeños el concepto de “conjunto” y que cada pieza es una fracción de la imagen más grande. También ayuda a desarrollar habilidades básicas como el reconocimiento de formas, la concentración, la fijación de objetivos, la paciencia y el sentido del logro, lo que situará a los niños en una buena posición para la escuela.
Los rompecabezas ayudan a desarrollar la coordinación mano-ojo y la motricidad fina debido a la naturaleza precisa de hacer coincidir cada pieza exactamente. Se puede observar cierta correlación entre la capacidad del niño para completar los rompecabezas y su habilidad para escribir a mano, ya que tiene que trabajar con cuidado.
El pensamiento crítico, el juicio, la capacidad de percepción visual y la memoria se ponen a prueba con un rompecabezas. Sólo hay una manera de completar un rompecabezas y no se puede hacer trampa. Los niños descubrirán que su tiempo mejora con cada puzzle, ya que empiezan a pensar de forma más lógica y a desarrollar tácticas.
La importancia de los rompecabezas en la primera infancia
Los puzzles son una gran herramienta para fomentar el desarrollo cognitivo de los niños de todas las edades, pero ¿te has preguntado alguna vez cuáles son los beneficios de los puzzles para los niños pequeños en particular? Hay muchos tipos de rompecabezas que se comercializan para los más pequeños, pero ¿qué hacen realmente por el desarrollo del cerebro?
Trabajar con rompecabezas enseñará a los niños a probar muchas opciones diferentes antes de encontrar la correcta. Practicarán el método de ensayo y error para encontrar una solución girando, volteando y moviendo las piezas hasta que encajen perfectamente. También les ayudará a aprender sobre la paciencia, la persistencia y la lógica.
Los niños tienen que voltear, desplazar y girar las piezas para conseguir que encajen, y mientras lo hacen están reforzando la conexión entre sus manos y sus ojos. Cuanto más agarren y manipulen los niños de corta edad, mejor. Los investigadores han llegado a decir que este tipo de actividad es incluso más importante para los niños de corta edad que aprender a leer y escribir.
Desarrollo de rompecabezas
¿Ha pensado en utilizar una mesa de rompecabezas en el aula? Hay varios beneficios específicos para el cerebro asociados con el uso constante de rompecabezas desafiantes, y se pueden utilizar con cualquier edad o habilidad lingüística
Los rompecabezas fortalecen las conexiones entre las células del cerebro y crean nuevas conexiones para mejorar la velocidad cognitiva. Los rompecabezas son especialmente buenos para la memoria a corto plazo, ya que los alumnos tienen que recordar los colores, las formas y la imagen general, mientras determinan qué piezas encajan.
El “Puzzle del alfabeto en mayúsculas y minúsculas” de Melissa y Doug ayuda a los niños a reconocer todas las letras del alfabeto, ¡grandes y pequeñas! Debajo de cada pieza del rompecabezas, los niños encontrarán una imagen que se relaciona con esa letra, lo cual es un gran desarrollo de vocabulario temprano.
Un buen rompecabezas hace que un rompecabezas piense en cosas de maneras nuevas/diferentes. Incluso si una idea no es la solución de un rompecabezas, todo el pensamiento fuera de la caja ayuda a entrenar la mente para trabajar en nuevas formas. Los rompecabezas exigen la experimentación y la aplicación del método científico, uniendo la creatividad/imaginación con la investigación empírica.
¿Qué habilidades desarrollan los rompecabezas en los adultos?
Hay un movimiento silencioso en este país, y no tiene que ver con aplicaciones, datos o la última moda. Siguiendo el ejemplo de los discos de vinilo, los libros para colorear y los juegos de mesa tradicionales, los puzzles están experimentando un resurgimiento de su popularidad. Tal vez, porque es una oportunidad para desconectarse y darse a sí mismo y a la familia un escape de la sobrecarga de información que está zumbando a través del tejido de nuestras vidas 24/7.
Alejarse de las pantallas, los dispositivos e incluso la televisión puede ser una tarea casi imposible, pero es vital para nuestra salud mental e incluso física. Un rompecabezas requiere toda tu atención y ahí reside la magia. Todo el mundo, desde los preadolescentes y los adolescentes hasta los padres con exceso de trabajo y las personas mayores, están volviendo a este tranquilo pasatiempo de la infancia. Llámelo revolución retro.
Los estudios demuestran que las personas que hacen rompecabezas y crucigramas tienen una vida más larga y menos posibilidades de desarrollar la enfermedad de Alzheimer, la pérdida de memoria o la demencia. Los rompecabezas estimulan el cerebro y, de hecho, alejan la placa que es el marcador del Alzheimer, según un estudio reciente publicado en Archives of Neurology. El estudio comparó los escáneres cerebrales de personas de 75 años con los de 25 años. Los ancianos que hacían rompecabezas con regularidad tenían escáneres cerebrales comparables a los de 25 años.