Cómo leer más
¿Busca más consejos? Los autores de esta guía la han convertido en un libro. Si has dejado que la lectura se desplace a los márgenes de tu vida, ahora es el momento de recuperarla. Haz un hueco, y dedica tiempo, a los libros que lees para ti, y a los que lees con tu hijo. Si quieres criar a un lector, sé un lector.
Los libros para bebés son una necesidadPuede que pienses que te has librado de los libros hasta que tu bebé sea al menos vertical, pero no es así. Incluso los recién nacidos se benefician de la experiencia de escuchar historias (y no pueden quejarse de tu gusto por los libros). Así que aprovecha. He aquí cómo:
Lee en voz alta, todos los días. Cualquier libro. Puedes leerle cualquier cosa a un recién nacido: un libro de cocina, una novela distópica, un manual para padres. El contenido no importa. Lo que sí importa es el sonido de tu voz, la cadencia del texto y las propias palabras. Las investigaciones han demostrado que el número de palabras al que está expuesto un bebé tiene un impacto directo en el desarrollo del lenguaje y la alfabetización. Pero aquí está el truco: El lenguaje tiene que ser en directo, en persona y dirigido al niño. Encender la televisión, o incluso un audiolibro, no cuenta. Por supuesto, es bueno empezar a leer en voz alta los libros infantiles que formarán parte de la biblioteca de tu hijo. Pero no te sientas limitado. Sólo asegúrate de disfrutar.
Actividades de lectura en clase
Encuentra un momento del día en el que puedas dedicar un tiempo de lectura a tu jornada. Puedes leer por la mañana, después del colegio o antes de acostarte. Hacer de la hora del cuento una rutina acogedora convierte la lectura en una actividad esencial y agradable.
Hacer conexiones con los temas que se leen es una forma divertida de mantener a los niños interesados. Por ejemplo, puede leer No puedes llevar un globo al Museo Metropolitano con su hijo antes o después de visitar un museo de arte. Esto da pie a conversaciones como la discusión de similitudes y diferencias entre el libro y la visita al museo.
Anime a su hijo a que le cuente un cuento de vez en cuando o a que vuelva a contar una historia después de haberla leído varias veces. No sientas la necesidad de corregir cómo está contando la historia. Deja que disfrute de la experiencia de contar historias.
Puede ser divertido leer libros en distintos lugares de la casa y sus alrededores. Prueba a leer La luciérnaga muy solitaria de Eric Carle en una habitación oscura con una linterna. He leído El cordero y la mariposa (escrito por Arnold Sundgaard, ilustrado por Eric Carle) a un grupo de niños de cuatro años en el césped, y cuando vieron pasar una mariposa, la asociaron con la del cuento. Incluso puedes preguntarle a tu hijo dónde quiere leer un determinado cuento.
Actividades de lectura divertidas
Leer en voz alta es una de las formas más sencillas de crear un vínculo con su hijo y, al mismo tiempo, de reforzar una serie de hitos del desarrollo. Tiene muchos beneficios para el desarrollo del lenguaje de los niños y otras habilidades de alfabetización emergentes. Al leerle a tu hijo, su capacidad de escucha y su capacidad de atención comienzan a aumentar. A medida que escuchan, absorben nuevas palabras del vocabulario y captan la pronunciación, el uso de las palabras, la gramática adecuada y las señales de alfabetización emocional. Además, la lectura en voz alta refuerza la imaginación del niño al dar vida a la historia.
Leer a un bebé ayuda a crear un vínculo especial. Disfrutan escuchando tu voz, sintiendo tu cuerpo y teniendo tu atención. Si le lees varias canciones infantiles y otros cuentos con ritmo y rima, como Chicka Chicka Boom Boom, de Bill Martin Jr. o la serie Pete the Cat, de Eric Litwin y James Dean, conseguirás que tu hijo se entusiasme y fomente un régimen positivo en torno a la lectura. Puede que incluso notes que tu hijo sonríe y da patadas de emoción. A medida que su hijo crezca, considere la posibilidad de leerle cuentos sencillos sobre acontecimientos rutinarios, como comer, bañarse o acostarse.
¿Cómo hacer la lectura divertida para niños? en línea
Tanto si su hijo tiene un libro favorito que quiere leer una y otra (y otra) vez, como si sólo quiere algunas ideas para mantenerlo interesado en un nuevo libro, aquí tiene algunos consejos para aprovechar al máximo el tiempo de lectura juntos.
Hacer que la hora de los cuentos sea divertida y emocionante no sólo ayudará a que los niños se enganchen a la lectura, sino que es una de las mejores maneras de que las familias establezcan vínculos, pasen tiempo de calidad juntos y compartan recuerdos que durarán para siempre.
Cuando vuelvas a leer un cuento con tu hijo, tómate tu tiempo para mirar los dibujos y hablar de los detalles que no viste la primera vez. A menudo se pueden encontrar pequeños personajes y argumentos escondidos en las imágenes. Hable de sus imágenes favoritas y de lo que puede decir sobre la historia a partir de lo que ve. Esto no sólo ayudará a su hijo a profundizar en la comprensión de la historia, sino que también contribuirá a sus habilidades de alfabetización visual.
Los libros también pueden servir de punto de partida para que su hijo hable de nuevos temas. Explore sus sentimientos haciéndole preguntas abiertas sobre los temas e ideas que se abordan en el libro, así como el impacto que tuvo en ellos.