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¿Cómo relajar a mi bebé para que se duerma?

abril 14, 2022

Bebé de sueño activo

A los recién nacidos les cuesta distinguir entre la noche y el día, lo que explica sus enloquecedoras rachas de sueño a todas horas. Pero cuando tu bebé tenga unas semanas, puedes empezar a enseñarle la diferencia y, de paso, establecer hábitos de sueño saludables. Estos consejos de expertos pueden ayudarte: Utiliza la luz de forma estratégica “Las luces activan el botón biológico de tu hijo”, dice Elizabeth Pantley, autora de The No-Cry Sleep Solution. Por otro lado, la oscuridad hace que el cerebro libere melatonina, una hormona clave para el sueño. Si los días de tu bebé son luminosos y las noches oscuras, se dará cuenta rápidamente de cuándo es la hora de dormir.

Si a tu bebé le cuesta conciliar el sueño, despertarle para darle de comer a última hora de la noche (entre las 22 y las 24 horas, por ejemplo) puede ayudarle a dormir durante más tiempo.Mantén las luces tenues y levanta suavemente a tu bebé dormido de la cuna. Acomódalo para que tome el pecho o el biberón. Es posible que se despierte lo suficiente como para empezar a mamar, pero si no lo hace, dale un suave empujón con la tetina hasta que se enganche. Cuando haya terminado, vuelve a acostarlo sin hacerle eructar.

Cómo calmar a un bebé que llora

Los susurros suaves y el suave balanceo son perfectos para calmar a los bebés. Pero los recién nacidos muy inquietos necesitan un poco más de vigor para ayudarles a calmarse y dormirse. Esto suena tan mal como el consejo de añadir un huevo crudo y viscoso a una mezcla para pasteles… ¡pero sin duda es la mejor manera de calmar a los recién nacidos muy inquietos por la noche!

Piensa que activar el reflejo de calma es como llamar la atención de alguien. Si una persona está enfrascada en una discusión acalorada, puede que tengas que tocarle el hombro varias veces -con mucho énfasis- sólo para que responda.

El vigor es exactamente la razón por la que los sonidos de la aspiradora y los paseos en coche por carreteras llenas de baches calman a los bebés. Y es por eso que agarrar el asiento del columpio y dar unos rápidos -pero diminutos- meneos es esencial para activar el reflejo de calma en un bebé gritón y amante del movimiento.

Piensa que calmar a un bebé es un baile… y tu pequeño amor lo dirige. Cuando esté llorando, haz las 5 “S” con más intensidad en tu “shush” y “jiggle”. Luego, cuando se calme, reduce gradualmente tu esfuerzo y guíalo hacia un suave aterrizaje en el que esté acurrucado con ruido blanco (tan fuerte como el de una ducha), y tal vez alguna succión o un suave balanceo.

Bebé autocalmante

Algunos bebés duermen mucho más que otros. Algunos duermen durante largos periodos, otros en breves ráfagas. Algunos duermen pronto toda la noche y otros no lo hacen durante mucho tiempo. Tu bebé tendrá su propio patrón de vigilia y sueño, y es poco probable que sea el mismo que el de otros bebés que conoces.

Tampoco es probable que se adapte a tus necesidades de sueño. Intenta dormir cuando tu bebé duerme. Si le das el pecho, en las primeras semanas es probable que tu bebé se quede dormido durante breves periodos de tiempo durante la toma. Sigue dándole el pecho hasta que creas que ha terminado o hasta que esté completamente dormido. Esta es una buena oportunidad para intentar descansar tú también.

El lugar en el que duerma tu bebé depende de ti, pero se recomienda que los bebés duerman en una cuna en la misma habitación que un adulto durante los primeros 6 a 12 meses, ya que se ha demostrado que esto reduce el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).

Los bebés mostrarán signos de cansancio, como muecas, bostezos, fruncimiento de ceño, succión, mirada fija, acurrucamiento, movimientos espasmódicos, exceso de actividad, apretar los puños, frotarse los ojos, estar inquieto o llorar. Responder pronto a estas señales de cansancio evita que tu bebé se angustie y facilita su sueño.

Cómo hacer dormir a un bebé

Todos conocemos esa sensación: cuando llegas a casa después de una noche de fiesta o de un evento de trabajo y estás realmente destrozado pero tu cerebro no se desconecta. A la mayoría de nosotros nos resulta imposible ir directamente a la cama a dormir. Necesitamos desconectar primero, para calmar nuestro activo cerebro. Nuestros bebés también necesitan este tiempo.

Como padres, somos muy buenos buscando las señales de sueño de nuestro bebé. Nos damos cuenta de que se frotan los ojos, miran fijamente, bostezan y pensamos: “genial, es hora de la siesta”. Los sacamos de sus alfombras de juego o de sus actividades y los llevamos a su bonita y oscura habitación, los colocamos en sus cunas y luego nos quedamos boquiabiertos cuando no se calman. ¿Por qué se resisten a dormir cuando están claramente cansados? ¿Me he perdido sus señales de sueño?

El cerebro de los bebés es extremadamente activo. Cada emoción que sienten, todo lo que ven, huelen y tocan está provocando conexiones neurológicas en su cerebro: están aprendiendo constantemente y sus mentes rara vez descansan. Por eso, para ayudar a preparar su cuerpo para el sueño, tenemos que salvar la brecha entre la estimulación y el descanso con un tiempo de relajación.

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