Pegaso aéreo wikipedia
La semana pasada hablé de Medusa, de cuyo cuello nació el caballo alado Pegaso. Esta semana, he pensado que sería apropiado volver a la historia de Pegaso, junto con su jinete más famoso, Belerofonte. Cuando me senté a escribir, mi pareja Nathaniel (un compañero amante de los mitos) me dijo que Pegaso y Belerofonte era uno de sus mitos favoritos, y se ofreció a hacer un post invitado para la semana. Acepté encantada, aunque ya veis que no pude resistirme a añadir algunas reflexiones propias al final. ¡Llévatelo, Nathaniel!
“Cuando era niño, no había nadie en el mito griego a quien envidiara más que a Belerofonte. Puede que no hayas oído hablar de él: no tiene el reconocimiento de un Heracles o un Teseo. Pero sí has oído hablar de la razón por la que le envidiaba: Pegaso.
Entablar amistad con un caballo, domarlo y montarlo: es la fantasía de la que están hechas innumerables novelas y películas. Entonces, ¿qué podría ser más emocionante que un caballo que pudiera ir aún más lejos, llevarte más allá de los límites de la propia gravedad? Puede que Perseo tuviera sandalias aladas, pero no eran nada comparado con el placer visceral de un compañero vivo y que respira, capaz de elevarte al cielo.
Compañías aéreas Pegasus
Pegaso era un caballo alado inmortal. El héroe Belerofonte domó a Pegaso y lo montó en la batalla para luchar contra el Khimaira, que respiraba fuego. Después de esta batalla, Belerofonte intentó montar a Pegaso hacia los cielos; sin embargo, Pegaso corcoveó, arrojando al héroe de su lomo. Pegaso siguió cabalgando hasta el cielo, donde ocupó su lugar entre las estrellas.
En otra versión de la historia, Pegaso es el fiel caballo de guerra de Zeus. Durante la batalla, Zeus tenía el poder de lanzar rayos y truenos al enemigo. Pegaso era el encargado de transportar los truenos y los rayos de Zeus durante la batalla. A veces, durante las batallas, el enemigo era muy fuerte y el ejército de Zeus se asustaba. Pegaso siempre se quedaba con Zeus, incluso cuando el enemigo luchaba con mucha fuerza. Como recompensa a la lealtad y valentía de Pegaso, Zeus lo colocó en el cielo como una constelación.
Pegaso para niños
El caballo alado aparece a menudo en la mitología griega como compañero de grandes héroes y ayudante del propio rey de los dioses. Tema predilecto de los artistas, su imagen ha perdurado a lo largo de los tiempos como una imagen de gracia y belleza.
Medusa fue en su día una de las jóvenes más bellas del mundo, hasta que fue violada por Poseidón en un templo de Atenea. Como castigo por profanar un espacio sagrado, la diosa virgen transformó a la joven en un terrible monstruo.
Con serpientes en el pelo y un rostro que podía convertir a los hombres en piedra, Medusa era una de las criaturas más temibles del mundo. Ella y sus hermanas, las Gorgonas, vivían en una cueva al borde del mundo.
Su hijo Crisáor no jugaría un papel importante en los mitos posteriores. Fue el padre del gigante Gerión, que protagonizó el décimo de los doce trabajos de Heracles, pero por lo demás su nombre desapareció de la leyenda.
El padre de Medusa era Oceanus y su madre, Phorcys, era una diosa del mar primordial. La propia Medusa puede haberse originado como una representación de los peligros del mar, concretamente de las rocas ocultas que podían provocar naufragios.
Constelación de Pegaso
Pegaso (en griego: Πήγασος, Pégasos, ‘fuerte’) es un caballo volador con alas en la mitología griega. Es hijo de Poseidón y de la Gorgona Medusa. En los dibujos animados y otras historias, se dice que Pegaso es el caballo del legendario héroe Hércules.
Hace mucho tiempo, Perseo mató al monstruo Medusa utilizando un escudo reflectante y unas sandalias aladas. Le cortó la cabeza, que tenía pelo de serpiente venenosa y era tan fea que convertía en piedra a cualquiera que la mirara de frente, y de su sangre surgió el caballo alado Pegaso. Algunas historias dicen que Perseo montó a Pegaso, pero otras dicen que se fue antes de que naciera Pegaso.
Años después, había un joven llamado Belerofonte, que vivía en Corinto. Belerofonte siempre había anhelado montar a Pegaso, pero éste se negaba a ser domado. Belerofonte decidió rezar a Atenea, que era la diosa griega de la sabiduría. Atenea le dio una brida de oro que le permitió capturar a Pegaso.
Más tarde, el hermano de un rey envió a Belerofonte en una búsqueda para derrotar a la Quimera, una bestia legendaria con cabeza de león que respiraba fuego, una cabeza de cabra que brotaba de su espalda y la cola de una serpiente. Juntos la derrotaron y Belerofonte fue honrado. Entonces Belerofonte decidió que quería ser inmortal y trató de volar con Pegaso al Monte Olimpo, hogar de los dioses. Zeus, enfadado, envió un tábano para que picara a Pegaso, que devolvió a Belerofonte a la Tierra.