Carácter dinámico
Cuando hablamos de personajes planos y personajes redondos, lo que queremos decir es que hay una diferencia -o una especie de distinción- entre los personajes que son superficiales, predecibles o poco sofisticados -a los que solemos llamar planos- y, por otro lado, los personajes redondos: personajes que tienen cierto tipo de profundidad o complejidad.
Y la pregunta es: ¿qué es exactamente esa profundidad? ¿Qué hace que un personaje redondo sea más interesante o más complejo? Si nos fijamos en una narración muy famosa -tomemos, por ejemplo, la primera película de La Guerra de las Galaxias -Episodio 4, Una nueva esperanza, 1977- podemos ver que Luke Skywalker, por ejemplo, es un buen personaje. ¿Cómo sabemos que es bueno? Tiene los ojos azules, el pelo rubio, viste de blanco -podemos hablar de eso cuando hablamos de simbolismo- en contraposición a Darth Vader, que es un personaje malo. ¿Cómo sabemos que es malo? Va vestido de negro, por supuesto. Lo cual es muy predecible y muy superficial. ¿Cómo sabemos que Obi-Wan Kenobi es un personaje bueno? Tiene el pelo y la barba blancos, parece una figura religiosa, como un monje, o alguien que es puro, etc.
Caracteres redondos
Un personaje redondo es un personaje que está bien desarrollado en la historia. El lector conoce los detalles de este personaje porque son importantes para la trama y para el avance de sus acciones. En otras palabras, un personaje redondo es más complejo, y como una persona real, el personaje tiene profundidad y emoción.
Un personaje redondo es lo contrario de un personaje plano, que no es desarrollado por el autor. Un personaje redondo puede ser estático (permanece igual a lo largo de la historia) o dinámico (cambia como resultado de la historia).
En Orgullo y prejuicio, de Jane Austen, la protagonista, Elizabeth Bennett, es un personaje redondo. Aprendemos mucho sobre los pensamientos y sentimientos de Elizabeth, e incluso cómo su orgullo se interpone, en un principio, en sus sentimientos por el señor Darcy.
En The Outsiders de S.E. Hinton, Ponyboy es un personaje redondo. Los pensamientos y sentimientos de Ponyboy lo pintan como no un “típico greaser”, y el lector puede entender mejor los prejuicios y estereotipos entre los greasers y los socs gracias a la complejidad de Ponyboy.
Carácter redondo Carácter plano
Enamorarse es un proceso glorioso. ¿Recuerdas cómo te sentías cuando acababas de conocer a alguien y lo sabías todo sobre él? ¿Cómo parecía no hacer nada malo y querías estar con él cada segundo del día? Entonces, un día sucedió algo. Algo que hizo o dijo te hizo ver que, después de todo, no había ninguna perfección, sino una persona normal a la que eliges amar de todos modos o dejar atrás.
Crear personajes puede y debe ser muy parecido a esto. Imaginas un escenario y construyes un gran héroe. Inteligente, fuerte, guapo, ingenioso: tu héroe lo tiene todo. El problema es que, si no llegas a la fase 2, cuando los defectos aparecen, tu personaje se quedará estancado en la fase de sueño y parecerá irreal o incluso aburrido.
La gente está jodida de todas las maneras. Personalmente, tiendo a hablar demasiado, a decir cosas que no debería, puedo ser bastante egoísta y luchar con problemas de orgullo. Hay un millón de molestias en mis defectos: suelo ser desordenado, empiezo proyectos y no siempre los termino, compro libros que nunca leo. Podría seguir, pero en realidad, esto no se trata de mí (¿ves? Puedo aprender a ser humilde, de verdad).
Ejemplo de carácter plano
Un personaje redondo es un personaje que está bien desarrollado en la historia. El lector conoce los detalles de este personaje porque son importantes para la trama y para la forma en que las acciones de este personaje hacen avanzar la trama. En otras palabras, un personaje redondo es más complejo, y como una persona real, el personaje tiene profundidad y emoción.
Un personaje redondo es lo contrario de un personaje plano, que no es desarrollado por el autor. Un personaje redondo puede ser estático (permanece igual a lo largo de la historia) o dinámico (cambia como resultado de la historia).
En Orgullo y prejuicio, de Jane Austen, la protagonista, Elizabeth Bennett, es un personaje redondo. Aprendemos mucho sobre los pensamientos y sentimientos de Elizabeth, e incluso cómo su orgullo se interpone, en un principio, en sus sentimientos por el señor Darcy.
En The Outsiders de S.E. Hinton, Ponyboy es un personaje redondo. Los pensamientos y sentimientos de Ponyboy lo pintan como no un “típico greaser”, y el lector puede entender mejor los prejuicios y estereotipos entre los greasers y los socs gracias a la complejidad de Ponyboy.