Beneficios de escuchar música
Susan Maury no trabaja, asesora, posee acciones ni recibe financiación de ninguna empresa u organización que pueda beneficiarse de este artículo, y no ha revelado ninguna afiliación relevante más allá de su nombramiento académico.
Estamos disfrutando de la única época del año en la que se dejan de lado las protestas de “¡no sé cantar!” y cantamos villancicos con los demás. Para algunos se trata de un acontecimiento especial que se produce una vez al año; el resto del año se deja a los profesionales que se encargan de cantar (excepto, quizás, algún momento a solas en la ducha o en el coche).
La música -y el canto en particular, como la más antigua y única forma ubicua de creación musical- desempeña un papel central en nuestras vidas y en las experiencias comunitarias compartidas, y esto ha sido así en todas las culturas desde que podemos rastrear a nuestros antepasados humanos.
Esta cuestión interesa actualmente a teóricos de la evolución, lingüistas, psicólogos y musicólogos. El debate se desató cuando el psicólogo Steven Pinker declaró su opinión de que la música es un spandrel, un subproducto evolutivo inútil de otro rasgo útil. En este caso, sugirió que la música es un subproducto del desarrollo del lenguaje, que no aporta ninguna ventaja ni sirve para nada.
Salud mental musical
Cantar refuerza el sistema inmunitario, según una investigación realizada por científicos de la Universidad de Fráncfort (Alemania) y publicada en el último número de la revista estadounidense Journal of Behavioral Medicine. Los científicos analizaron la sangre de personas que cantaban en un coro profesional de la ciudad, antes y después de un ensayo de 60 minutos del Réquiem de Mozart.Descubrieron que las concentraciones de inmunoglobina A -proteínas del sistema inmunitario que funcionan como anticuerpos- y de hidrocortisona, una hormona antiestrés, aumentaban significativamente durante el ensayo. Una semana después, cuando pidieron a los miembros del coro que escucharan una grabación del Réquiem sin cantar, comprobaron que la composición de su sangre no cambiaba significativamente. Los investigadores, entre los que se encontraba Hans Guenther Bastian, del Instituto de Educación Musical de la Universidad de Fráncfort, llegaron a la conclusión de que cantar no sólo reforzaba el sistema inmunitario, sino que también mejoraba notablemente el estado de ánimo de los intérpretes.Cantar es bueno para la salud.
Greg Cohen, de la Universidad George Washington, hizo un seguimiento de una coral de cantantes de la tercera edad en Arlington (Virginia). La edad media de los cantantes de la coral es de 80 años, el más joven tiene 65 y el mayor 96. Los datos preliminares muestran que los cantantes sufren menos depresión, hacen menos visitas al médico al año, toman menos medicamentos y han aumentado sus otras actividades.
Cantar en el coro
Una de las principales características de los cristianos, tanto históricamente como en todo el mundo, es cantar y hacer música. Esto contrasta con el Islam, por ejemplo, donde muchos consideran la música como haram (prohibida), y el canto no suele figurar en las prácticas de las mezquitas.
Ahora bien, hay todo tipo de razones por las que el cristianismo es una fe que canta, ya que la práctica de entonar melodías para el Señor, y de cantar himnos en particular, tiene muchas finalidades. Mi intención en este artículo es centrarme específicamente en el canto congregacional (más que en la música cristiana en general), y abrir sus tres propósitos principales; las tres razones principales por las que, según las Escrituras, Dios nos ha dado esta capacidad y nos ha llamado a participar en esta actividad. Estas razones son: (1) para ayudarnos a alabar, (2) para ayudarnos a orar, y (3) para ayudarnos a proclamar. Veamos cada una de ellas por separado.
¿Cómo debemos pensar en la alabanza? Lo primero que hay que señalar es que, según la Escritura, la alabanza a Dios tiene normalmente dos caras o aspectos: podemos alabar a Dios a Dios y podemos alabar a Dios a los demás. En este sentido, existe un paralelismo con la forma en que podemos alabar a los demás. Por ejemplo, puedo alabar a mi esposa diciéndole lo maravillosa que es, o puedo alabarla diciéndole a usted lo maravillosa que es.
Beneficios del canto para la salud
El canto es el acto de producir sonidos musicales con la voz.[1][2][3] Una persona que canta se denomina cantante o vocalista (en el jazz y/o la música popular).[4][5] Los cantantes interpretan música (arias, recitativos, canciones, etc.) que puede cantarse con o sin acompañamiento de instrumentos musicales. El canto suele realizarse en un conjunto de músicos, como un coro de cantantes o una banda de instrumentistas. Los cantantes pueden actuar como solistas o acompañados por cualquier cosa, desde un solo instrumento (como en la canción artística o algunos estilos de jazz) hasta una orquesta sinfónica o una gran banda. Los diferentes estilos de canto incluyen la música artística, como la ópera y la ópera china, la música india, la música japonesa y los estilos de música religiosa, como el gospel, los estilos de música tradicional, la música del mundo, el jazz, el blues, el ghazal y los estilos de música popular, como el pop, el rock y la música electrónica de baile.
El canto puede ser formal o informal, arreglado o improvisado. Puede practicarse como forma de devoción religiosa, como afición, como fuente de placer, consuelo o ritual, como parte de la educación musical o como profesión. La excelencia en el canto requiere tiempo, dedicación, instrucción y práctica regular. Si se practica con regularidad, los sonidos pueden ser más nítidos y potentes.[6] Los cantantes profesionales suelen desarrollar su carrera en torno a un género musical concreto, como la música clásica o el rock, aunque hay cantantes con éxito cruzado (que cantan en más de un género). Los cantantes profesionales suelen recibir formación vocal por parte de profesores de canto o entrenadores vocales a lo largo de su carrera.