Ejemplos de cuentos
Este artículo ha sido redactado por Stephanie Wong Ken, MFA. Stephanie Wong Ken es una escritora residente en Canadá. Sus escritos han aparecido en Joyland, Catapult, Pithead Chapel, Cosmonaut’s Avenue y otras publicaciones. Tiene un máster en ficción y escritura creativa por la Universidad Estatal de Portland.
Para muchos escritores, el relato corto es el medio perfecto. Es una actividad refrescante. Para muchos, es tan natural como respirar para los pulmones. Mientras que escribir una novela puede ser una tarea hercúlea, casi todo el mundo puede elaborar -y, sobre todo, terminar- un relato corto. Escribir una novela puede ser una tarea agotadora, pero escribir un relato corto no es lo mismo. Un relato corto incluye el escenario, la trama, el personaje y el mensaje. Al igual que una novela, un buen relato corto emocionará y entretendrá al lector. Con un poco de lluvia de ideas, redacción y pulido, puedes aprender a escribir un relato corto con éxito en poco tiempo. Y la mayor ventaja es que puedes editarlo con frecuencia hasta que estés satisfecho.
Este artículo ha sido redactado por Stephanie Wong Ken, MFA. Stephanie Wong Ken es una escritora residente en Canadá. Sus escritos han aparecido en Joyland, Catapult, Pithead Chapel, Cosmonaut’s Avenue y otras publicaciones. Tiene un máster en ficción y escritura creativa por la Universidad Estatal de Portland. Este artículo ha sido visto 4.572.722 veces.
Cómo empezar un relato corto
Todo novelista o escritor de relatos cortos ha escuchado la pregunta muchas veces: “¿De dónde sacas las ideas?”. La respuesta es siempre la misma: de todas partes. Muchos aspirantes a escritores creen que tienen que esperar un repentino destello de inspiración, pero generar ideas es más un proceso que una epifanía.
Presta atención a lo que ocurre a tu alrededor. Esos retazos de conversación que has escuchado durante la cena, el coche que has visto ir en dirección contraria por la autopista en hora punta, el anciano que camina a duras penas por un callejón oscuro pronunciando repetidamente el nombre de Maryanne, todo ello podría dar pie a una historia. Aunque algunos de los acontecimientos que describas sean extraordinarios, no tienen por qué serlo. Sólo tienen que ser interesantes.
Acostúmbrate a fijarte en lo que ocurre a tu alrededor, desde lo más emocionante hasta lo más mundano, anotando las cosas que te llaman la atención. Utiliza la aplicación para tomar notas de tu teléfono para capturar los momentos. Si eres de la vieja escuela, guarda un pequeño cuaderno o unas fichas. El acto de anotar las cosas te recordará que debes concentrarte y estar en el momento. Los mejores escritores son buenos observadores.
Cómo hacer una buena historia
Las piedras para cuentos caseros son un divertido complemento para cualquier sala de juegos o aula. Son un buen recurso para contar historias y despiertan la creatividad y la imaginación. Hoy voy a explicarlos un poco más en detalle y a mostrarte cómo hacer un juego de piedras de cuentos con el que tus hijos disfrutarán durante años.
Las piedras de los cuentos son una oportunidad estupenda para el juego imaginativo, y además son muy sensoriales: los colores son vibrantes, son frías al tacto, y para mí hay algo relajante en el sonido de las piedras al chocar entre sí mientras juegas con ellas.
Jackie CurrieJackie es madre, esposa, cuidadora de niños en casa y el espíritu creativo detrás de Happy Hooligans. Está especializada en manualidades y actividades para niños, recetas fáciles y crianza. Empezó a escribir en su blog en 2011, y hoy en día, Happy Hooligans inspira a más de 2 millones de padres, cuidadores y profesionales de la educación infantil de todo el mundo.
Cómo escribir una historia para principiantes
Para escribir una historia corta con éxito, hay que causar un gran impacto con el menor número de palabras posible. Por eso, cada decisión que tomes como autor debe ser deliberada, cada personaje debe actuar con un propósito y cada palabra debe ser impactante. Cuando menos es definitivamente más, centrarse en ciertos detalles puede ayudar a impregnar su historia corta con mucho color, significado y subtexto, sin palabras superfluas.
1. Gestos de los personajes – Cuando escribes con una restricción de palabras, quieres mostrar la personalidad de tus personajes sin usar demasiado diálogo. Una forma de hacerlo es mediante gestos físicos. Por ejemplo, un cirujano que acaba de salir del quirófano podría colgar la cabeza mientras se acerca a los seres queridos del paciente. Este simple gesto dirá mucho sobre cómo fue la cirugía, sin que escribas una sola palabra más.
2. Elección de la ropa: la vestimenta de los personajes puede aportar información sobre su personalidad, e incluso ayudar a explicar el escenario o impulsar la trama. Si el protagonista lleva un estetoscopio, una etiqueta con su nombre y una bata de médico cubierta de sangre, el lector sabrá que su personaje es un médico que acaba de sufrir un gran trauma.