La luz interior lyrics meaning
La luz interior, la luz de Dios, la luz de Cristo, Cristo en el interior, la de Dios, el Espíritu de Dios en nosotros, la luz interior y la luz interior son frases relacionadas que se utilizan comúnmente en la Sociedad Religiosa de los Amigos (cuáqueros) como metáforas de la luz de Cristo que brilla en ellos o sobre ellos. Fue propagada por el fundador del movimiento cuáquero, George Fox, quien “predicaba la fe y la confianza en la ‘luz interior’ (la presencia de Cristo en el corazón)”[1][2] Los primeros cuáqueros eran conocidos por sentarse en silencio y meditar en las palabras de la Biblia hasta que sentían la luz interior de Dios brillando sobre ellos y el Espíritu Santo hablando. [3] Los primeros cuáqueros enseñaban:[4] “Dios se revela dentro de la conciencia y el conocimiento de cada individuo por medio del Espíritu Santo, siendo Cristo mismo la Luz para iluminar la pecaminosidad del hombre y guiarlo en el camino de la verdad y la justicia. … esta luz está en todos los hombres por la gracia de Dios para conducirlos a Cristo, y que la misma luz guíe diariamente al cristiano”[4].
La Clave de la Fe y la Práctica de la Sociedad Religiosa de los Amigos afirma que la Luz Interior es “tanto el Jesús histórico y viviente, como la Gracia de Dios extendida a las personas que simultáneamente nos hace conscientes de nuestros pecados, nos los perdona y nos da la fuerza y la voluntad de superarlos” y “nos enseña la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto, la verdad y la falsedad, el bien y el mal”. [5][6] Como tal, la palabra luz es comúnmente utilizada por los cristianos (incluyendo a los cuáqueros) como una metáfora de Cristo, derivada de muchos pasajes bíblicos, incluyendo Juan 8:12,[7] que afirma:
Luz interior cuáquera
Esta reflexión trata brevemente la relación entre la cultura y la espiritualidad y cómo estas construcciones influyen en las concepciones de la identidad humana en el contexto de esbozar mi propia experiencia como miembro de la comunidad cuáquera. Hoy en día es raro encontrar una cultura sin hibridez, es decir, en la que no exista algún grado de exposición a otras culturas y a otras personas. Además, los seres humanos, independientemente de su cultura, crean un cambio constante en sus comunidades y entornos y ellos mismos están en constante cambio. En medio de este persistente tumulto, he encontrado consuelo en la comunidad cuáquera. Aquí destaco las principales creencias y la forma de actuar de ese grupo. Me interesa especialmente transmitir cómo los valores cuáqueros se relacionan con la cuestión perennemente significativa de la búsqueda humana de la esperanza. Tras introducir la hibridez de la cultura y los conflictos que inevitablemente surgen de las diferencias, este ensayo aborda mi experiencia como cuáquero y el estado del cuaquerismo en la actualidad. Al introducir mi propio término, “empa-cate”, destaco la importancia de la escucha activa y la enseñanza, si los seres humanos han de entenderse a sí mismos y a los demás. El concepto de empa-cate me ha proporcionado un espacio para comprender el pasado de la humanidad, me ha animado a dedicar tiempo a escuchar activamente a los demás en el presente y a trabajar por un futuro en el que todos puedan coexistir a pesar de sus diferencias.
Teoría de la luz interior
Dos cualidades son indispensables: en primer lugar, un intelecto que, incluso en la hora más oscura, conserve algunos destellos de la luz interior que conduce a la verdad; y en segundo lugar, el valor de seguir esta tenue luz allá donde nos lleve.
La luz interior proviene en realidad del alma; ya está dentro de nosotros. En el momento en que podamos tener libre acceso a nuestra alma, veremos que esta luz sale a la luz para impregnar toda nuestra existencia exterior.
Las buenas cualidades humanas -la honestidad, la sinceridad, el buen corazón- no pueden comprarse con dinero, ni pueden ser producidas por mis máquinas, sino sólo por la propia mente. Podemos llamar a esto la luz interior, o la bendición de Dios, o la cualidad humana. Esta es la esencia de la humanidad.
No hay cantidad de oscuridad que pueda extinguir la luz interior. Lo importante es no pasarse la vida intentando controlar el entorno que nos rodea. La tarea es controlar el entorno dentro de nosotros.
El espíritu humano brilla desde esa pequeña luz interior de la duda de si tenemos razón, mientras que los que creen con certeza que poseen la razón son oscuros por dentro y oscurecen el mundo exterior con crueldad, dolor e injusticia.
Iglesia de la luz interior
El concepto de la luz interior es fundamental en muchas versiones de la teología cuáquera (o de la Sociedad Religiosa de los Amigos). Se refiere a la presencia de Dios dentro de una persona y a una experiencia directa y personal de Dios. Los cuáqueros creen que Dios habla a todo el mundo, pero que para oír su voz hay que aprender a estar quieto y a escucharla activamente; lo que Paul Lacout llamó un “silencio que es activo”. [1] Creen no sólo que los individuos pueden ser guiados por esta Luz Interior, sino que los Amigos deben reunirse y recibir la guía colectiva de Dios compartiendo las preocupaciones y las orientaciones que él da a los individuos. En una reunión de los Amigos se suele llamar “ministerio” al hecho de que una persona comparta en voz alta lo que la Luz Interior le dice.
Los términos relacionados con la Luz Interior incluyen “Luz de Dios”, “Luz de Cristo”, “Espíritu de Dios en nosotros”, “Luz interior”, “Cristo interior” y Espíritu de Cristo. A menudo son utilizados indistintamente por los Amigos modernos y posiblemente por los primeros. Algunas personas también lo identifican con la expresión “la de Dios en todos”, que fue utilizada por primera vez por uno de los cofundadores de la Sociedad de Amigos, George Fox.