Discurso de Malala
-Malala Yousafzai-Todos somos MalalaMalala es una joven sabia, sensible y centrada que ha experimentado lo mejor y lo peor del ser humano. “Debemos creer en el poder y la fuerza de nuestras palabras. Nuestras palabras pueden cambiar el mundo”.
-Malala Yousafzai-Esta joven tiene el amor y el apoyo del mundo entero. También ha recibido numerosos y merecidos premios en muchos países. Malala es sencillamente una joven increíble, una inspiración para quienes luchan por promover un cambio sostenible en el mundo: “Por eso los terroristas tienen miedo de la educación. No quieren que las mujeres reciban educación porque entonces se harían más poderosos”.
Malala yousafzai español
“Garantizar los derechos de las mujeres y las niñas, eliminar la discriminación y lograr la igualdad de género es el núcleo del sistema internacional de derechos humanos, empezando por el artículo 1 de la Declaración Universal de Derechos Humanos, que afirma inequívocamente: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos…”.
El 9 de octubre, 64 años después de que se escribieran estas famosas palabras, Malala Yousufzai, de 14 años, recibió un disparo en la cabeza y en el cuello cuando volvía de la escuela en la ciudad de Mingora, en Pakistán. El espeluznante ataque perpetrado por el grupo comúnmente conocido como los talibanes paquistaníes fue seguido de una declaración pública en la que amenazaban con matar a cualquier otra persona, incluidas mujeres y niños, que sostuviera opiniones con las que no estuvieran de acuerdo.
“Malala fue atacada por su destacado papel en la promoción del derecho fundamental a la educación de las niñas y por criticar a los talibanes por acciones como la destrucción de escuelas de niñas y la amenaza de matar a las niñas que asisten a ellas. El hecho de que trataran de hacerle precisamente eso puso de manifiesto la extrema intolerancia y el peligro físico al que se enfrentan muchas niñas que intentan ejercer su derecho humano básico a la educación en muchos otros países.
Toor pekai yousafzai
En esta entrevista de View From The Top, la activista y Premio Nobel de la Paz Malala Yousafzai comparte su misión de garantizar que los 130 millones de niñas que no están escolarizadas puedan acceder a la educación.
“Mi objetivo es conocer a estas niñas, pero también elevar su historia para que los líderes las escuchen a ellas y no a mí. Y este es mi objetivo en cada reunión… decir: ‘Vamos a escuchar a estas activistas. Tienen algo que decirles. Habéis ignorado sus voces, así que escuchadlas y ellas os dirán cuáles son los problemas de las niñas y las mujeres en este país'”.
Durante las entrevistas dirigidas por los estudiantes y ante una audiencia en directo, líderes de todo el mundo comparten sus ideas sobre el liderazgo eficaz, sus valores personales fundamentales y las lecciones aprendidas a lo largo de su carrera.
Malala Yousafzai: Mi historia no es una historia excepcional. Podría haber sido la historia de cualquier niña si sus padres y hermanos les hubieran permitido hablar. A muchas se lo impidieron sus familiares. A muchas se lo impidieron los hombres de la sociedad.
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“Era feminista antes de conocer el mundo feminista. Decía que la primera persona contra la que tenía que luchar era él mismo. … Sabía que tenía que cambiar, así que primero se desafió a sí mismo y dijo: ‘Sabes, no voy a tratar a mi hija de esta manera. Voy a tratarla de otra manera. Voy a darle los mismos derechos. Voy a enviarla a la escuela. Voy a dejar que se exprese”.
“A veces ves tanta decepción y desesperación y desesperanza en los medios de comunicación y entre la gente que tiene tanto. Y luego vas a un campo de refugiados y sientes que deben ser las personas más deprimidas del mundo porque no tienen nada: no tienen refugio, no tienen electricidad, no tienen educación de calidad. Luego hablas con ellos y son las personas más esperanzadas. Todas las chicas que he conocido en los campos de refugiados son muy positivas respecto a su futuro; creen que un día podrán volver a su país. Tienen -todas ellas- sueños”.
“No deberíamos asumir que es culpa de estas personas que son refugiados; nunca es su culpa. Y deberíamos tratar de entender cómo queremos que otras personas nos acojan cuando nos pasa a nosotros… Creo que tenemos que mirarlo desde el punto de vista humano y ser más acogedores y considerarlos como nuestros hermanos y hermanas. Seamos humanos y entendamos que todos vivimos en este único planeta Tierra”.