Cómo afecta la música al cerebro
La música tiene un poder que va más allá de las palabras. El placer de compartir la música crea conexiones entre padres e hijos, ya que los sonidos y los ritmos rodean al niño en un mundo de sensaciones y sentimientos. La música también ofrece una experiencia de aprendizaje alegre y gratificante y alimenta la imaginación y la creatividad del niño. Descubra cómo la música favorece todas las áreas del desarrollo de los niños pequeños.
Es la hora de la siesta y Benjamín, de 2 años y medio, se retuerce en su cuna intentando ponerse cómodo. “Canta mi canción”, dice. Su profesora empieza a cantar lentamente una canción que inventó hace varios meses, sólo para Benjamin.
“¿Quién quiere a Benjamin? Son su mamá y su papá. ¿Quién quiere a Benjamin? Su hermana mayor, Madison. ¿Quién quiere a Benjamin? Es la Sra. Sharlene. ¿Quién quiere a Benjamin? La señorita Callie”. Su profesora canta los nombres de muchas de las personas que quieren a Benjamin en su vida. Observa a Benjamin acurrucarse bajo su manta, con los ojos cargados de sueño.
Para los niños muy pequeños, la música tiene un poder y un significado que va más allá de las palabras. En primer lugar, y lo más importante, compartir la música con los niños pequeños es simplemente una forma más de dar y recibir amor. La música y las experiencias musicales también contribuyen a la formación de importantes conexiones cerebrales que se establecen durante los tres primeros años de vida (Carlton 2000).
La música y el desarrollo del cerebro en la primera infancia
Los padres utilizan instintivamente la música para calmar y tranquilizar a los niños, para expresarles amor y alegría, y para atraerlos e interactuar con ellos. Los padres pueden aprovechar estos instintos naturales aprendiendo cómo la música puede influir en el desarrollo infantil, mejorar las habilidades sociales y beneficiar a los niños de todas las edades.
Un estudio realizado en 2016 en el Instituto del Cerebro y la Creatividad de la Universidad del Sur de California descubrió que las experiencias musicales en la infancia pueden realmente acelerar el desarrollo del cerebro, especialmente en las áreas de adquisición del lenguaje y las habilidades de lectura. Según la Fundación de la Asociación Nacional de Comerciantes de Música (NAMM), aprender a tocar un instrumento puede mejorar el aprendizaje de las matemáticas e incluso aumentar las puntuaciones de la selectividad.
Pero los logros académicos no son el único beneficio de la educación y la exposición a la música. La música estimula todas las áreas del desarrollo infantil y las habilidades para la preparación escolar, incluidas las intelectuales, socio-emocionales, motoras, de lenguaje y de alfabetización en general. Ayuda a que el cuerpo y la mente trabajen juntos. Exponer a los niños a la música durante su desarrollo temprano les ayuda a aprender los sonidos y el significado de las palabras. Bailar al ritmo de la música ayuda a los niños a desarrollar sus habilidades motrices al tiempo que les permite practicar la autoexpresión. Tanto para los niños como para los adultos, la música ayuda a reforzar la memoria.
Investigación sobre la música y el desarrollo del cerebro
En los últimos años, los investigadores han aprendido mucho sobre el desarrollo del cerebro. Los bebés nacen con miles de millones de células cerebrales, llamadas neuronas. Durante los primeros años de vida, esas neuronas forman conexiones con otras neuronas. Con el tiempo, las conexiones que nuestros cerebros utilizan regularmente se hacen más fuertes.
Los niños que crecen escuchando música desarrollan fuertes conexiones relacionadas con la música en el cerebro. Algunas de estas vías musicales afectan a nuestra forma de pensar. Escuchar música clásica parece mejorar nuestro razonamiento espacial, al menos durante un tiempo. Y aprender a tocar un instrumento puede tener un efecto aún más prolongado en ciertas habilidades de pensamiento.
No exactamente. La música parece preparar nuestro cerebro para ciertos tipos de pensamiento. Después de escuchar música clásica, los adultos pueden realizar ciertas tareas espaciales con mayor rapidez, como armar un rompecabezas.
¿Por qué ocurre esto? Las vías de la música clásica en nuestro cerebro son similares a las que utilizamos para el razonamiento espacial. Cuando escuchamos música clásica, las vías espaciales se “activan” y están listas para ser utilizadas. Este cebado facilita la resolución rápida de un rompecabezas. Pero el efecto dura poco tiempo. La mejora de nuestras habilidades espaciales desaparece aproximadamente una hora después de dejar de escuchar la música.
Cómo afecta la música a tu vida
Las investigaciones sobre el impacto de las intervenciones musicales han indicado efectos positivos en una variedad de habilidades. Estos resultados sugieren que las intervenciones musicales pueden tener un mayor potencial para apoyar los procesos educativos y el desarrollo de los niños. Este artículo revisa las últimas pruebas sobre el efecto de las intervenciones musicales en el desarrollo de los niños en edad escolar. Se realizaron búsquedas en cuatro bases de datos electrónicas desde enero de 2010 hasta junio de 2016 utilizando música, instrucción musical, educación musical, lección musical, formación musical, desarrollo, niño, estudiante y alumno como palabras clave para la búsqueda. Dos revisores evaluaron de forma independiente los estudios para determinar si cumplían los criterios de inclusión establecidos. Los estudios se compararon en cuanto a la configuración del estudio, la calidad metodológica, los componentes de la intervención, las variables de resultado y la eficacia. Una revisión de estos estudios seleccionados (n = 46) sugiere efectos beneficiosos de la intervención musical en el desarrollo de los niños, aunque no se pueden establecer conclusiones claras. Se revisan los posibles factores de influencia que podrían contribuir al resultado de la intervención y se hacen recomendaciones para la investigación adicional.