Cuarteto Asturia wikipedia
MARTIN HAYES QUARTETEl Martin Hayes Quartet amplía muchas de las ideas musicales perseguidas por Martin en su larga colaboración con Dennis Cahill. La melodía sigue siendo el centro, pero ahora con una gama añadida de posibilidades sonoras proporcionadas por el clarinete bajo y la viola d’amore. La adición de estos instrumentos crea una textura auditiva añadida y amplía las posibilidades rítmicas al tiempo que permite un mayor papel para la improvisación. Tanto Doug como Liz aportan una gran experiencia musical que contribuye a los espaciosos y ricos arreglos del Cuarteto.
Cómo formar un cuarteto de cuerda
La interpretación musical es, como una de las principales artes escénicas, una experiencia social. El intérprete, el público y el compositor interactúan entre sí de forma directa e indirecta, lo que hace que la interpretación musical sea un tema de investigación fértil a la hora de estudiar la interacción humana. En este artículo, nos centramos en la interacción entre los miembros de un conjunto musical y la interdependencia que se establece entre ellos como resultado.
Los músicos que tocan juntos no sólo deben sincronizar sus mecanismos internos de cronometraje, sino también dar forma conjunta a los aspectos más matizados de su interpretación, como la entonación o la dinámica, para alcanzar un objetivo estético (presumiblemente) compartido (Keller, 2008). Para conseguirlo mientras actúan, los miembros del conjunto se comunican entre sí de forma no verbal para intercambiar información utilizando la retroalimentación auditiva y visual (Goebl y Palmer, 2009; D’Ausilio et al., 2012).
Los mecanismos que permiten la interacción social entre los intérpretes también dependen del tipo de conjunto. Los conjuntos más grandes suelen estar dirigidos por un director de orquesta que actúa como líder en términos de coordinación temporal (Rasch, 1988; Luck y Toiviainen, 2006), evalúa la interpretación y proporciona instrucciones adicionales sobre cómo debe llevarse a cabo. Por otro lado, los conjuntos pequeños no suelen tener director y esas tareas recaen en los propios músicos. En los conjuntos pequeños, cada intérprete suele tener su parte individual, mientras que en los conjuntos grandes es habitual que determinadas subsecciones de la misma familia de instrumentos tengan partes idénticas; ejemplo de ello son las secciones de primer y segundo violín dentro de una orquesta sinfónica. El objeto de investigación de este estudio es el cuarteto de cuerda, un pequeño conjunto sin director de cuatro músicos (dos violines, una viola y un violonchelo) en el que cada músico tiene su propia parte individual. Aunque tradicionalmente se considera que el primer violinista es el “líder” de un cuarteto de cuerda, no se puede esperar que siempre sea así; además, no hay garantía de que tenga la mayor influencia en la toma de decisiones del grupo (Young y Colman, 1979).
Cómo unirse a un cuarteto de cuerda
CREMONA QUARTET reúne cuatro de los instrumentos de cuerda más valiosos del mundo. Con muestras estéreo alineadas con la fase y vibrato capturado en la interpretación, además de un amplio muestreo cromático de 20 articulaciones, cada peculiaridad y matiz de estos tesoros históricos está ahora a disposición de los productores a través de una gran cantidad de controles de parámetros de última generación.
Conocida como la cuna de las cuerdas, la ciudad italiana de Cremona tiene una historia larga y especial. Construidos hace cientos de años con madera de los bosques de los alrededores, cada instrumento tiene su propia personalidad, y juntos su sonido representa el corazón, el alma y la magia de la región. Una colección de cuatro preciados instrumentos de cuerda que se remontan a la década de 1600, CREMONA QUARTET captura y preserva cada detalle de sus raras características.
Estos instrumentos fueron fabricados por los mejores luthiers de la historia. Con cada articulación de cada nota tocada por virtuosos intérpretes en el Auditorio Giovanni Arvedi de Cremona, y grabada con un detalle excepcional, sus sonidos se han inmortalizado para producciones contemporáneas.
Haydn op 20 nr 4
En música, un cuarteto[1] o quartette[2] (francés: quatuor, alemán: Quartett, italiano: quartetto, español: cuarteto, polaco: kwartet) es un conjunto de cuatro cantantes o intérpretes instrumentales; o una composición musical para cuatro voces o instrumentos[1][2].
En la música clásica, una de las combinaciones más comunes de cuatro instrumentos en la música de cámara es el cuarteto de cuerda[3]. La elección y el número de instrumentos se derivan de los registros de la voz humana: soprano, alto, tenor y bajo. En el cuarteto de cuerda, dos violines interpretan los registros vocales de soprano y alto, la viola el registro de tenor y el violonchelo el de bajo.
Con menos frecuencia, los cuartetos de cuerda se escriben para otras combinaciones del conjunto de cuerdas estándar. Entre ellos se encuentran los cuartetos para un violín, dos violas y un violonchelo, especialmente de Carl Stamitz (6 composiciones) y otros; y para un violín, una viola y dos violonchelos, de Johann Georg Albrechtsberger y otros.