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¿Cómo sacar la risa?

abril 13, 2022

No poder reírse

Aunque reírse en momentos inadecuados puede resultar embarazoso, en realidad es una reacción natural de algunas personas cuando se enfrentan a una situación muy estresante. Esto podría deberse a que la risa te hace sentir mejor sobre lo que está sucediendo, incluso si se trata de una mala situación[1].

También podría ser una reacción que te ayuda a aliviar el estrés y a liberar tu propia tensión. Cuando la risa inapropiada afecte negativamente a tu vida, empieza por frenar tus ganas de reír. Si esto no funciona, es posible que tengas que tratar las causas subyacentes de tu risa. Cuando no puedas dejar de reírte, podrás afrontarlo.

El contenido de este artículo no pretende sustituir el asesoramiento, el examen, el diagnóstico o el tratamiento médico profesional. Siempre debe ponerse en contacto con su médico u otro profesional sanitario cualificado antes de iniciar, cambiar o interrumpir cualquier tipo de tratamiento sanitario.

Resumen del artículoXSi te entran ganas de reír en un mal momento, cálmate pensando en algo triste o incluso aterrador. Distráigase pellizcándose discretamente el brazo o mordiéndose el labio, el interior de la mejilla o la lengua. Para disimular una risa, exhala completamente y tose un poco. Si quieres conocer más consejos de nuestra coautora de la Consejería sobre cómo distraerte, como recitar en silencio las tablas de multiplicar, sigue leyendo.

Cómo conseguir una risa divertida

Dicen que se necesitan más músculos para fruncir el ceño que para sonreír, y aunque no hay pruebas fehacientes que lo demuestren, sabemos que sonreír tiene algunos beneficios en la vida real. No siempre es lo más fácil, sobre todo después de un día largo y estresante. Pero si te atreves a sonreír, te sentirás mejor.

Cuando sonríes, tu cerebro libera unas pequeñas moléculas llamadas neuropéptidos que te ayudan a combatir el estrés. También entran en juego otros neurotransmisores como la dopamina, la serotonina y las endorfinas. Las endorfinas actúan como un analgésico suave, mientras que la serotonina es un antidepresivo. Un estudio sugiere incluso que sonreír puede ayudarnos a recuperarnos más rápido del estrés y a reducir nuestro ritmo cardíaco. De hecho, puede que incluso merezca la pena fingir una sonrisa y ver a dónde nos lleva. Hay pruebas de que forzar una sonrisa puede aumentar el estado de ánimo y el nivel de felicidad. Dicho esto, si sufres de depresión o ansiedad debes hablar con tu médico inmediatamente para encontrar el mejor tratamiento para ti.

Reírse más

La risa es una respuesta fisiológica que implica una acción rítmica e involuntaria, y denota alegría, felicidad o gozo.    En los últimos años se han realizado innumerables estudios que demuestran los efectos positivos que tiene la risa en la salud física y mental.

1. Establezca la intención de reírse más. Propóngase, o establezca la intención, de reírse a carcajadas tan a menudo como pueda. Establecer el objetivo de reírse más es tan importante como establecer los objetivos de hacer más ejercicio, comer más sano y beber más agua.

Una forma de conseguirlo es adquirir un calendario del año en una caja que te haga reír rápidamente cuando eches un vistazo al chiste del día. Elige un calendario del año en una caja que te haga cosquillas y ponlo al lado de tu despertador.

3. Sonríe más. Sí, lo sé: sonreír no es reír. Sin embargo, sonreír también tiene un sinfín de beneficios. Cuando sonríes, empiezan a producirse automáticamente cambios felices, tanto interna como externamente. Además, puedes pensar en la sonrisa como un calentamiento para la risa.

No puedo reír más

La risa nerviosa es una risa provocada por la expresión de alarma, vergüenza, incomodidad o confusión del público, más que por la diversión. La risa nerviosa suele tener una expresión menos robusta que la de una “buena carcajada” y puede ir acompañada de miradas confusas o de un silencio incómodo por parte de otros miembros del público. La risa nerviosa se considera análoga a la risa de cortesía, que puede producirse mediante un esfuerzo más consciente en un intento de hacer avanzar la situación más rápidamente, especialmente cuando el cómico hace una pausa para reírse.

La risa nerviosa es una reacción física al estrés, la tensión, la confusión o la ansiedad. El neurocientífico Vilayanur S. Ramachandran afirma que “tenemos risa nerviosa porque queremos hacernos a la idea de que lo horrible que nos hemos encontrado no es realmente tan horrible como parece, algo que queremos creer”. El psicólogo y neurocientífico Robert Provine, de la Universidad de Maryland, estudió más de 1.200 “episodios de risa” y determinó que el 80% de las risas no son una respuesta a una broma intencionada[1].

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