La obra literaria más larga
Para animar sus clases de escritura creativa, la Sra. P ha hecho que la clase 5 escriba una historia en un rollo de papel pintado. Cada niño debe añadir una frase para convertirlo en el cuento más largo de la historia. Pronto nos vemos envueltos en la historia del Rey Fred, que escapa por poco de la muerte a manos de los piratas e intenta salvar a las sirenas del monstruoso Wugblammer. (Mientras Ecky Thump da rienda suelta a su imaginación, Noah Mount, que odia el inglés, sigue intentando matar a todo el mundo. Ni él ni nadie se da cuenta de que en un mundo de fantasía paralelo todos sus personajes cobran vida, en el torbellino de acción que es la historia. Es cuando los niños cometen faltas de ortografía o se olvidan de lo que ha pasado cuando las cosas se ponen interesantes. El arzobispo “holey” se encuentra destrozado, revoloteando como un fantasma, mientras que un ejército de “noches” ha sumido al reino en la más absoluta oscuridad. La historia se retuerce con consecuencias cada vez más hilarantes. Totalmente ilustrado en blanco y negro, este libro es realmente original y cautivador.
Recuerdos elefantiásicos de cosas pasadas
TardisLos spoilers se definen con precisión aquí. Las reglas varían según el medio de la historia. La información de las historias de la televisión no puede añadirse aquí hasta después de la parte superior o inferior de la hora, hora británica, más cercana al rodaje de los créditos finales en BBC One. Por lo tanto, los fans de América que sean sensibles a los spoilers deberían evitar Tardis los domingos hasta que hayan visto el episodio.
A una chica se le ha pedido, bajo pena de muerte, que cuente una historia que entretenga al Califa. Ella decide contar la historia más larga del mundo, lo que prolongará su vida. Cada noche cuenta su historia en la alcoba del Califa, con el Califa, sus guardias y su visir como público. Su historia comienza con un anciano.
El anciano y su nieta adoptiva viven en un lugar donde la fantasía se considera sacrílega. Sin embargo, la niña tiene una vívida imaginación y entretiene a su abuelo con sus historias sobre su futuro. Le habla de viajes en una máquina que él creará. A medida que su nieta crece, el anciano empieza a preocuparse por complacerla, temiendo que alguien la descubra y la declare bruja.
Libros más largos
La elaboración de una lista de las novelas más largas arroja resultados diferentes según se cuenten las páginas, las palabras o los caracteres. La longitud de un libro suele asociarse a su tamaño, concretamente al número de páginas, lo que lleva a muchos a suponer que el libro más grande y grueso equivale a su longitud. El recuento de palabras es una forma directa de medir la longitud de una novela de una manera que no se ve afectada por las variaciones de formato y tamaño de las páginas; sin embargo, la traducción de la historia a diferentes idiomas y dialectos da lugar a diferentes recuentos de palabras.
La comparación del recuento de palabras entre distintos sistemas de escritura plantea una dificultad especial. Los caracteres logográficos chinos utilizados para escribir las lenguas de Asia Oriental representan cada uno un morfema y no están separados por espacios. Un mismo carácter puede representar a veces una palabra y otras formar parte de una palabra mayor. Por ejemplo, los caracteres 中 zhong y 国 guo pueden utilizarse de forma independiente para significar “medio” y “reino”, respectivamente, pero también pueden combinarse en Zhongguo 中国, “China” (es decir, “El Reino Medio”). Teóricamente se podría construir una frase sustantiva Zhongguo Zhong Guo 中国中国 que significara “reinos del centro de China”. La ausencia de un marcado formal de los límites de las palabras significa que sería difícil determinar mecánicamente si una frase de este tipo consta de dos, tres o cuatro palabras sin saber chino. Por ello, las bibliografías de Asia Oriental suelen ofrecer sólo el recuento de caracteres, sin intentar ningún recuento de palabras. Sin embargo, existen dificultades similares en las lenguas europeas: en algunos casos es arbitrario que una expresión se escriba como una o dos palabras: por ejemplo, airshow frente a air show; en alemán es muy común unir dos o más palabras para formar palabras compuestas, lo que refleja simplemente una característica del idioma. En japonés, algunos caracteres representan “palabras” y otros sólo “sílabas”.
Venmurasu
La elaboración de una lista de las novelas más largas arroja resultados diferentes según se cuenten las páginas, las palabras o los caracteres. La longitud de un libro suele asociarse a su tamaño, concretamente al número de páginas, lo que lleva a muchos a suponer que el libro más grande y grueso equivale a su longitud. El recuento de palabras es una forma directa de medir la longitud de una novela de una manera que no se ve afectada por las variaciones de formato y tamaño de las páginas; sin embargo, la traducción de la historia a diferentes idiomas y dialectos da lugar a diferentes recuentos de palabras.
La comparación del recuento de palabras entre distintos sistemas de escritura plantea una dificultad especial. Los caracteres logográficos chinos utilizados para escribir las lenguas de Asia Oriental representan cada uno un morfema y no están separados por espacios. Un mismo carácter puede representar a veces una palabra y otras formar parte de una palabra mayor. Por ejemplo, los caracteres 中 zhong y 国 guo pueden utilizarse de forma independiente para significar “medio” y “reino”, respectivamente, pero también pueden combinarse en Zhongguo 中国, “China” (es decir, “El Reino Medio”). Teóricamente se podría construir una frase sustantiva Zhongguo Zhong Guo 中国中国 que significara “reinos del centro de China”. La ausencia de un marcado formal de los límites de las palabras significa que sería difícil determinar mecánicamente si una frase de este tipo consta de dos, tres o cuatro palabras sin saber chino. Por ello, las bibliografías de Asia Oriental suelen ofrecer sólo el recuento de caracteres, sin intentar ningún recuento de palabras. Sin embargo, existen dificultades similares en las lenguas europeas: en algunos casos es arbitrario que una expresión se escriba como una o dos palabras: por ejemplo, airshow frente a air show; en alemán es muy común unir dos o más palabras para formar palabras compuestas, lo que refleja simplemente una característica del idioma. En japonés, algunos caracteres representan “palabras” y otros sólo “sílabas”.