Por qué el Ratón Pérez deja dinero
1. Cuando a un niño se le caen los dientes, aparece una burbuja dorada con el nombre de ese niño en el castillo del Ratoncito Pérez. El Ratoncito Pérez se lleva todas las burbujas cuando recoge los dientes, y pone el diente en la burbuja del niño para que pueda flotar de vuelta a su castillo y ella pueda volar hacia el siguiente diente perdido. Cuando el Hada de los Dientes comienza sus visitas nocturnas, lleva todas las burbujas en cuerdas como si fueran un gran ramo de globos. Cuando termina la noche, la última burbuja que contiene el último diente la ayuda a flotar hasta su casa.
2. La casa del Ratoncito Pérez está hecha con los dientes que recoge. Es un enorme castillo blanco con torres y un foso brillante. El Hada de los Dientes es muy exigente con los dientes que recoge y utiliza para su castillo, por lo que si el diente del niño tiene una caries o una mancha oscura, arrojará el diente malo a la boca de una gran cueva donde se convertirá en polvo de hadas.
3. El Hada de los Dientes es muy pequeña y muy silenciosa. Puede flotar a través de ventanas y paredes cerradas con sus poderes mágicos. Si un niño empieza a agitarse, o a despertarse, mientras ella está sustituyendo su diente por dinero, lo vuelve a dormir espolvoreando su polvo de hada.
¿El hada de los dientes come dientes?
Papá Noel. ¿Has oído hablar de él? El Conejo de Pascua. ¿Ha pasado por tu casa una o dos veces? Si ha crecido en Estados Unidos o tiene hijos pequeños, lo más probable es que se haya topado con alguna de estas figuras míticas. ¿Y la más extraña de todas? El Hada de los Dientes. Si alguna vez te has parado a pensar en el concepto de la tradición americana del Ratón de los Dientes, puede que pienses que es un poco extraño. ¿Cómo empezó esta extraña tradición? Tenemos la primicia de la verdad sobre el Hada de los Dientes.
Aunque el Ratoncito Pérez es una creación bastante moderna, es un mito que ha evolucionado a lo largo de los siglos. Muchas leyendas, mitos y tradiciones diferentes rodean la pérdida de los dientes de leche a lo largo de los años. Aunque la leyenda del Ratoncito Pérez varía mucho entre las diferentes culturas, la mayoría de ellas tienen algún tipo de tradición en torno a la forma de deshacerse de los dientes de leche perdidos de un niño. Algunos arrojaban los dientes al fuego, otros al tejado de la casa y otros consideraban que debían enterrarse. Las primeras tradiciones europeas sugerían enterrar los dientes para evitar dificultades al niño, mientras que otras culturas llevaban los dientes de sus hijos para disfrutar de mejor suerte durante la batalla. Una de las tradiciones más recientes que también surgió en Europa era la de una deidad de los dientes en forma de ratón que entraba en las habitaciones de los niños para quitarles los dientes de leche.
Qué hace el Ratón Pérez con tus dientes leer en voz alta
El Hada de los Dientes es una figura fantástica de la primera infancia en las culturas occidentales y de influencia occidental[1]. El folclore afirma que cuando los niños pierden uno de sus dientes de leche, deben colocarlo debajo de la almohada o en la mesilla de noche y el Hada de los Dientes les visitará mientras duermen, sustituyendo el diente perdido con un pequeño pago[2].
En el norte de Europa existía la tradición del tand-fé o cuota dental, que se pagaba cuando un niño perdía su primer diente[3]. Esta tradición se recoge en escritos tan tempranos como las Eddas (c. 1200), que son el primer registro escrito de las tradiciones nórdicas y del norte de Europa. En la cultura nórdica, se decía que los dientes de los niños y otros artículos pertenecientes a ellos traían buena suerte en la batalla, y los guerreros escandinavos colgaban los dientes de los niños en una cuerda alrededor del cuello.
La recompensa que se deja varía según el país, la situación económica de la familia, las cantidades que los compañeros del niño dicen recibir y otros factores.[4][5] Una encuesta realizada en 2013 por Visa Inc. descubrió que los niños estadounidenses reciben una media de 3,70 dólares por diente.[6][7] Según la misma encuesta, solo el 3% de los niños encuentra un dólar o menos y el 8% encuentra un billete de cinco dólares o más bajo su almohada.[8]
¿Cómo se responde a lo que hace el Ratón Pérez con los dientes
El folclore de muchas partes del mundo cuenta que cuando los niños pierden un diente de leche, deben colocarlo debajo de la almohada y el Ratoncito Pérez les visitará mientras duermen, para llevarse ese diente perdido y dejar un pequeño pago, especialmente si esos dientes se han mantenido muy limpios y brillantes.
Este artículo pretende fomentar la comprensión y el conocimiento de temas generales de salud bucodental. No pretende sustituir el consejo, el diagnóstico o el tratamiento de un profesional. Busque siempre el consejo de su dentista o de otro profesional sanitario cualificado ante cualquier duda que pueda tener sobre una enfermedad o tratamiento.