No busques consejo para tus miedos übersetzung
Dice el refrán que “lo único que hay que temer es el propio miedo”, pero hay muchas cosas que dan miedo. Saber cómo superar el miedo y la ansiedad es crucial. Gestionar bien nuestro miedo y nuestra ansiedad -y conocer la diferencia entre ambos- es importante para nuestra salud mental y nuestro éxito profesional.
Cuando vivíamos en cuevas, necesitábamos evaluar constantemente si estábamos a salvo. Una sensibilidad muy afinada a las amenazas potenciales era necesaria para sobrevivir. No experimentamos los mismos tipos de estrés que hace miles de años, pero la respuesta es prácticamente la misma.
Nuestros cuerpos -y cerebros- reaccionan a ambos tipos de amenazas de la misma manera. En otras palabras, da igual que la amenaza sea física, emocional o social. Las campanas de alarma del sistema nervioso autónomo no distinguen entre hablar en público y un tigre de dientes de sable. De hecho, muchos de nosotros preferiríamos esto último.
Aunque sea desagradable, el miedo es una respuesta saludable. Nuestra respuesta de lucha o huida nos mantiene vivos, seguros y prósperos. Sin embargo, cuando el miedo constante te impide vivir la vida al máximo, se convierte en ansiedad.
Cómo superar la biblia del miedo
Ahí está de nuevo, ese dolor punzante que recorre tu cuerpo como un rayo helado. De repente, la horrible sensación de vacío se extiende por ti. Tus manos empiezan a temblar y te sientes abandonado y completamente impotente. Sin embargo, en realidad no ha pasado nada, aparte del hecho de que te acaban de dejar. Pero no en el sentido de una ruptura: simplemente no has podido soportar la marcha de alguien cercano. Ahora tus emociones se vuelven locas. Y aunque tu cabeza sabe que estás exagerando por completo, el miedo a la pérdida te tiene atrapado una vez más.
Todos conocemos el miedo a las despedidas y a la pérdida de seres queridos, situaciones o cosas. Algunos tienen mucho miedo de perder a su pareja o a su mejor amigo. Otro teme por su trabajo o su estatus social. Hasta cierto punto, esto es perfectamente natural. Pero a veces el miedo a la pérdida se nos va tanto de las manos que prácticamente nos adormece. Perdemos de vista la realidad, sufrimos terriblemente y construimos un muro protector a nuestro alrededor. De dónde viene el miedo a la separación, cómo reconocerlo y cómo superarlo, lo aprenderá en este artículo de la revista.
¿Por qué tememos
Amy Morin, LCSW, es la editora en jefe de Verywell Mind. También es psicoterapeuta, autora del exitoso libro “13 Things Mentally Strong People Don’t Do” (13 cosas que no hacen las personas mentalmente fuertes) y presentadora del podcast The Verywell Mind.
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y en caso de actualizaciones sustanciales. Más información.
Tener un poco de miedo es normal. De hecho, el miedo le ayuda a protegerse instintivamente del daño. El miedo puede ayudarte a reconocer cuando estás a punto de hacer algo peligroso, y puede ayudarte a tomar una decisión más segura.
Sin embargo, es posible que tengas miedo a cosas que no son realmente peligrosas, como hablar en público. Tu miedo a hablar en público podría impedirte avanzar en tu carrera o participar en tradiciones como hacer un brindis en la boda de tu mejor amigo.
Si realmente quieres irte de vacaciones a Europa, pero tu miedo a volar te hace dudar, puede que sientas que tu miedo te impide vivir tu sueño. Si ves que tu miedo te frena o te crea problemas mayores en tu vida, enfrentarte a él puede ayudarte a aprender a enfrentarte mejor al miedo y, en última instancia, a superarlo.
Superar el miedo – deutsch
El miedo es muy útil para nosotros como humanos. Es una respuesta vital al peligro físico y emocional: si no lo sintiéramos, no podríamos protegernos de las amenazas legítimas. Pero a menudo tememos situaciones que están lejos de ser peligrosas y estos miedos pueden impedirnos experimentar cosas maravillosas como una mejor audición.
Los seres humanos estamos programados para protegernos. Esa conocida oleada de adrenalina, o respuesta de “lucha o huida”, se activa cuando percibimos una amenaza para nuestra vida o bienestar. Pero ahora que hemos superado la ley de la selva, el miedo nos obliga a centrarnos en las áreas de nuestra vida que nuestros instintos nos dicen que necesitan nuestra atención, ya sea un problema en el trabajo, una mala relación o quizás un problema auditivo que debe ser tratado. El miedo nos obliga a concentrarnos al máximo y nos ayuda a deshacernos de las distracciones.
Los científicos también han demostrado que el miedo puede darnos los llamados “superpoderes”, por ejemplo, la capacidad de levantar objetos pesados cuando estamos bajo una presión extrema. El kinesiólogo de la Universidad de Pensilvania, Vladimir Zatsiorsky, descubrió que, en situaciones de competición, los levantadores de pesas pueden levantar un 12% más, porque en situaciones críticas, en las que hay un beneficio potencial (un título de campeón del mundo, por ejemplo), tu cerebro subconsciente piensa que el beneficio vale la pena para arriesgar una lesión.