Cómo no distraerse con las redes sociales
Esto puede significar eliminar el ruido de fondo excesivo o reducirlo a un nivel que te ayude a concentrarte. El nivel que mejor funcione para ti depende de tu personalidad, del tipo de ruido y de lo exigente que sea la tarea en la que te estás concentrando.
Si te encuentras pensando en cosas que preferirías estar haciendo en lugar de la tarea que tienes entre manos, tómate un momento para pensar en lo que harás después de completar la tarea, y en lo mucho que disfrutarás gracias a lo que has conseguido.
Si te preocupa cómo responderá la gente a lo que produzcas, como un ensayo o una presentación, puede que tengas dudas a la hora de empezar. Para controlar esto, intenta anotar cómo una tarea o un tema encaja con lo que ya sabes, o recuérdate una vez que superaste una tarea similar.
Cómo concentrarse mientras se estudia
Si eres el padre o el cuidador de un adolescente que se enfrenta a la época de exámenes, es importante que sepas cómo ayudarle a acceder a formas prácticas de reducir las distracciones. Conocer algunas formas sencillas de ayudarles a mantener el rumbo, supone una gran diferencia en su estado de ánimo y, potencialmente, en los resultados de sus exámenes.
Cuando éramos lo suficientemente jóvenes como para participar en nuestros propios estudios, las distracciones seguían existiendo: ¿recuerdas la televisión? – pero la vida moderna de hoy significa que hay aún más cosas que se interponen en el camino de tu hijo adolescente. Y para complicar aún más las cosas, las distracciones que tientan a tu hijo a alejarse de su revisión de los exámenes son aún más invasivas. Pero no te preocupes. Puedes tomar medidas positivas para minimizar las distracciones y ayudar a tu hijo adolescente a resistir la tentación de la tecnología, y ayudarle a conseguir los mejores resultados de estudio posibles.
Entender los patrones de energía es clave. Para la mayoría de las personas, el mejor momento para concentrarse es el final de la mañana. Para un porcentaje más pequeño de la población, ese estallido de concentración se produce mejor a última hora de la noche. Entender la forma en que tu hijo adolescente trabaja mejor puede ayudarte a evitar muchas discusiones frustrantes. Si la noche es su periodo más productivo, no te resistas a ello: si le ayudas a crear un horario que refleje sus preferencias, le estarás ayudando a dar un paso más hacia el éxito en los estudios.
Clase de distracción
Estás listo para terminar el capítulo que intentabas hacer desde los últimos tres días. Debido a la falta de concentración no has podido hacerlo, pero hoy te has sentado en tu silla con la determinación de que nadie puede impedir que termines ese tema y que éste es el primer paso en la preparación de tu examen.
Empezaste a estudiar con todo el celo. Todo iba según el plan hasta que, te encuentras con la necesidad de coger el móvil que acaba de hacer el sonido de una notificación de WhatsApp, puede ser de tu mejor amigo que te está invitando a salir a cenar o puede ser un meme enviado en un grupo. Sin embargo, te controlas y continúas con tus estudios, pero después de un tiempo, vuelves a escuchar el sonido de tu teléfono sonando, es tu mejor amigo llamándote. Puede que te esté llamando para darte alguna noticia caliente sobre la universidad o sobre vuestros intereses comunes. Te detienes de nuevo, ya que te has propuesto no distraerte con nada de lo que se te presente, sin saber que eso debilita lentamente tu determinación de estudiar, y por fin te das por vencido cuando tu madre se acerca con buñuelos calientes que acaba de cocinar, ya que está lloviendo afuera y qué mejor que comer esto con este tiempo.
Siempre distraído con el teléfono
La universidad puede ser abrumadora cuando intentas mantener tus notas, tener un trabajo a tiempo parcial y/o equilibrar tus relaciones. La mayoría de nosotros nos distraemos con notificaciones, mensajes de texto y llamadas telefónicas. Según una investigación llevada a cabo por el Dr. Larry Rosen, profesor emérito de la Universidad Estatal de California en Dominguez Hills, “el estudiante típico” se distrae al menos cinco de cada 15 minutos que reserva para estudiar”, la mayoría de las veces como resultado del uso de mensajes de texto y redes sociales.
Hacer malabares con múltiples proyectos y plazos en la escuela puede ser estresante. Cuando estás trabajando en una tarea, es fácil olvidarse de otra. Puedes organizar tus plazos y gestionar tu tiempo de forma más eficiente con un horario adecuado. Averigua cuándo eres más productivo y reserva tiempo para tus tareas y actividades. Llevar un planificador o un calendario digital te ayudará a llevar un control de tus clases y tareas. Las agendas de papel son perfectas para quienes les gusta escribir listas de tareas y programar citas a mano. Un estudio sugiere que el simple hecho de escribir las cosas ayuda a aumentar la concentración y la memoria.