Kansas city sur de méxico
México es uno de los diez mayores productores de Residuos Sólidos Urbanos del mundo debido a su gran tamaño y a su gran población. El país genera unas 120.000 toneladas de residuos al día, que suman 44 millones de toneladas al año. Esta situación se ha visto agravada por un aumento de los residuos (estimado entre el 3,3 y el 16,5% según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático de México) debido al periodo de cierre del país, que ha afectado a los patrones de consumo y tratamiento médico. En esta situación, las nuevas plantas de clasificación basadas en la automatización de la gestión de residuos, adquieren aún más importancia por su potencial para mejorar la situación ambiental en México e impulsar la economía circular.
“STADLER pretende ser un impulsor del cambio que México necesita para alcanzar un estándar de economía verde conformado por innovaciones tecnológicas y modelos de negocio. Ambos traerán sin duda beneficios ambientales, sociales y económicos”, explica Natalya Duarte, Gerente de Ventas para México de STADLER.
Metro de Ciudad de México
En 1916, Pancho Villa y sus rebeldes, entre los que se encontraba un joven Indiana Jones, asaltaron un tren minero en las afueras de Ciudad Guerrero, con el fin de adquirir explosivos para romper la muralla de la ciudad como parte de su plan para invadirla. El tren era arrastrado por una locomotora de vapor propiedad de N de M y tenía el número de circulación 1150. Se utilizó en la incursión villista del asentamiento, proporcionando suficiente aceleración y potencia de frenado para enviar un vagón plano cargado con toneladas de dinamita a través de la muralla de la ciudad, que la derribó en una explosión masiva. Esto permitió que Villa y sus hombres se movilizaran y salieran a las calles para enfrentarse a las fuerzas federales.
N de M fue el sistema nacional de ferrocarriles de México, propiedad del gobierno, desde 1938 hasta 1995. Comenzó a funcionar como empresa privada en 1903, cuando empezó a prestar servicios desde Ciudad de México. A finales de la década de 1930, N de M pasó a ser administrada por el gobierno federal de México.
Ferromex
Debido a la gran actividad minera de esta línea, sus trenes fueron ocasionalmente víctimas de intentos de asalto, sobre todo por parte del revolucionario mexicano Pancho Villa, que en 1913 asaltó un tren que transportaba plata y logró retener a un empleado de Wells Fargo para pedirle un rescate. En enero de 1916, unos asaltantes asociados a Villa detuvieron un tren de MNW y masacraron a 18 empleados estadounidenses de la empresa ASARCO.
Durante la expedición punitiva dirigida por el general estadounidense John J. Pershing en 1916 para intentar capturar a Pancho Villa, el uso del ferrocarril para el transporte de suministros fue un punto de discordia entre la expedición estadounidense y el gobierno provisional mexicano de Venustiano Carranza. Las tropas estadounidenses emplearon “trenes de camiones” para abastecer a las tropas debido a la negativa de Carranza a permitir a los estadounidenses el uso de la línea ferroviaria.
Ferrocarril de México
Este artículo necesita citas adicionales para su verificación. Por favor, ayude a mejorar este artículo añadiendo citas de fuentes fiables. El material sin fuente puede ser cuestionado y eliminado.Buscar fuentes: “Ferrocarriles Nacionales de México” – noticias – periódicos – libros – académico – JSTOR (febrero de 2015) (Aprende cómo y cuándo eliminar este mensaje de la plantilla)
Ferrocarriles Nacionales de México (más conocido como N de M y especialmente en sus últimos años como FNM) fue la empresa ferroviaria estatal de México desde 1938 hasta 1998, y antes de 1938 (que data del régimen de Porfirio Díaz), un importante ferrocarril controlado por el gobierno que unía la Ciudad de México con las principales ciudades de Ciudad Juárez, Nuevo Laredo y Matamoros en la frontera con Estados Unidos. Los primeros trenes a Nuevo Laredo desde la Ciudad de México comenzaron a operar en 1903[1].
En 1898, José Yves Limantour propuso un sistema de concesiones de las compañías ferroviarias en las futuras líneas que se construirían a partir de 1900. Ese mismo año la Secretaría de Hacienda promulgó la primera Ley General de Ferrocarriles. Esta ley establecía un sistema por el que se otorgarían concesiones a las empresas para el tendido de líneas ferroviarias sólo cuando éstas satisficieran las necesidades económicas del país y unieran el interior de la República con sus puertos comerciales más importantes.