Cómo tratar a una persona necia
La insensatez es cuando alguien actúa sin sabiduría o sentido común. Una decisión insensata es la que se toma sin un razonamiento o juicio cuidadoso. Un acto de insensatez se llama necedad. Una persona que muestra necedad puede ser llamada tonta. Es diferente a la estupidez, que es la falta de inteligencia[1].
El tonto sabio es un personaje literario común, una persona que al principio parece poco inteligente pero que luego se revela como poseedor de una gran sabiduría. Un ejemplo de ello es Sancho Panza en el Quijote de Cervantes. Sancho es un campesino inculto que al principio parece tener poco sentido o experiencia. Sin embargo, a medida que se desarrolla el relato, se revela como poseedor de un gran sentido común, expresado primero a través de un sinfín de proverbios, pero luego a través de su propia habilidad. En este sentido, constituye una yuxtaposición cómica al propio Quijote, que es muy culto pero está loco; ambos suplen lo que al otro le falta.
Cómo lidiar con una esposa tonta
La insensatez es la falta de conciencia o de normas sociales que provoca ofensas, molestias, problemas y/o perjuicios. La impulsividad y/o las influencias pueden afectar a la capacidad de una persona para tomar decisiones que de otro modo serían razonables. En este sentido, se diferencia de la estupidez, que es la falta de inteligencia[1] Un acto de insensatez se denomina locura.
Andreas Maercker, en 1995, definió la necedad como un pensamiento rígido, dogmático e inflexible que provoca sentimientos de amargura y probable fastidio. Se considera el fundamento de las ilusiones de grandiosidad como la omnisciencia, la omnipotencia y la inviolabilidad[cita requerida].
El Libro de los Proverbios caracteriza los rasgos de la necedad.[2] La necedad y la sabiduría se contraponen en la carta de Pablo a los Corintios. Condena la arrogancia intelectual y aboga por una actitud humilde en lugar de la necedad, en la que entonces es posible aprender[3].
Platón transvaloraba la razón por encima de la necedad, para él la integridad de la aceptación de un estado propio era el principio de la sabiduría, decía “Es el hombre más sabio el que se sabe mal preparado para el estudio de la sabiduría”[4].
Causas de la insensatez
La necedad es el resultado de que una persona utilice mal la inteligencia que Dios le ha dado. Un necio utiliza su capacidad de razonamiento para tomar decisiones equivocadas. El tipo más básico de necedad es negar la existencia de Dios o decir “no” a Dios (Salmo 14:1). La Biblia asocia la insensatez con el mal genio (Proverbios 14:16-17), el habla perversa (Proverbios 19:1) y la desobediencia a los padres (Proverbios 15:5). Nacemos con una necedad innata, pero la disciplina nos ayudará a entrenar la sabiduría (Proverbios 22:15).
Proverbios 19:3 dice que la necedad es contraproducente: “La propia necedad del hombre lo lleva a la ruina”. Jesús en Marcos 7:22 utiliza una palabra que significa “insensatez” y se traduce como “necedad”. En ese contexto, Jesús describe lo que sale del corazón del hombre y lo contamina. La necedad es una de las evidencias de que el hombre tiene una naturaleza contaminada y pecaminosa. Proverbios 24:9 dice: “Las maquinaciones de la necedad son pecado”. La necedad, entonces, es realmente el quebrantamiento de la ley de Dios, pues el pecado es anarquía (1 Juan 3:4).
Para el necio, el camino de Dios es una tontería. “El mensaje de la cruz es una tontería para los que se pierden”. (1 Corintios 1:18; cf. versículo 23). El evangelio parece ser necedad para los que no son salvos porque no tiene sentido para ellos. El necio está completamente fuera de fase con la sabiduría de Dios. El evangelio va en contra de la inteligencia y la razón nativa del incrédulo, y sin embargo “Dios se agradó de salvar a los creyentes por medio de la locura de lo que se predicó” (1 Corintios 1:21).
¿Quién es una persona insensata según la Biblia?
El escritor de Proverbios divide el mundo en dos tipos de personas: sabios y necios. Tiene mucho que decir sobre ambos. Un hombre se hace sabio escuchando al Señor y viviendo su vida en la entrega a la voluntad y el camino de Dios.
Y, los necios le harán daño. Arruinan las relaciones, nublan la toma de decisiones y llevan a otros por el mal camino. Si usted es uno de los que busca la sabiduría, encontrará que tratar con personas necias es una gran carga.
Recientemente he estado ayudando a un pastor a resolver un problema con una persona muy necia en su iglesia. Este individuo es orgulloso y cree que su opinión es más importante que la de cualquiera. Esta persona está creando conflictos y discordia en la iglesia, y hay una clara falta de voluntad para someterse a los líderes espirituales piadosos.
Una persona tonta envuelta en ropa religiosa es aun mas dificil de tratar, porque se acercan a otros bajo la apariencia de espiritualidad. Su ira y sus problemas son difíciles de tratar, lo que el escritor de Proverbios señala. Es un peso muy pesado para un líder.